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Considero que uno de los principales retos más grandes hoy en día en la infraestructura de TI es la constante evolución y adaptabilidad de las organizaciones hacia la tecnología. Se presenta un problema cuando una organización no tiene un plan de adopción o una visión de cómo la tecnología toma importancia dentro de los planes de crecimiento, y evidentemente cualquier tema de infraestructura presupone una inversión.
Por lo que es importante considerar que, en cualquier organización, la inversión a la infraestructura de TI soportará cualquier proceso de digitalización que hoy en día se esté llevando a cabo.
Es un componente involucrado en el soporte a las aplicaciones, cualquier tema de acceso a la tecnología de la información que está involucrada en la infraestructura, sus componentes principales son el hardware y software.
El hardware es cualquier tipo de servidor, como los componentes de procesamiento, componentes para interconexión en red software, tipo de aplicativo que se utilice, sistema interno y el servicio As a Service.
La necesidad se crea a partir de algo tan sencillo, como:
Un ejemplo son las plataformas de venta en línea para la competitividad de las empresas, ya que en el ambiente digital actual tiene la ventaja de que mantengamos esa infraestructura corriente, actualizada, holgada para poder soportar los retos de las empresas; porque a veces, si no se tiene un correcto dimensionamiento de la evolución que pueda llegar a tener esa infraestructura, se puede llegar a consumir bastante rápido.
Entonces las ventajas de una infraestructura correctamente dimensionada, soportada y actualizada van a repercutir directamente en los ingresos de cualquier empresa.
Los tipos de infraestructura de TI, hardware y software, se encuentran en diversos componentes que van de las instalaciones, como el espacio físico donde la infraestructura que aloja son los centros de datos, cuartos de comunicaciones y todo lo que involucra para el correcto alojamiento de estos servicios, como:
También se incluye el tema de procesamiento informático, como el procesador, memoria, componentes de red, sistema DRP, sistema operativo del servidor central y algún aplicativo específico de la organización. Muchos de ellos no son a veces tangibles ni visibles, pero forman parte de esa estructura y es de suma importancia, ya que entregan el servicio todos los días.
La principal ventaja es que puedes incorporar o desplegar en tiempo récord la infraestructura que brinde el soporte para la ejecución de las tareas propias sin necesidad de completar un ciclo de compra. En la instalación básicamente se adquiere un servicio que se puede implementar en tiempo bastante acelerado en comparación con el de desplegar una infraestructura tradicional.
En los servicios de BIT, adicional a la cadena de suministros de implementación y soporte, se incorporan los administrados que incluyen una serie de mix entre suministro e implementación, pero que en el cliente se reflejan como un servicio simple; por ejemplo, contratar internet que brinde la conectividad necesaria o los recursos que se requieran para desplegar las aplicaciones digitales de las que depende la continuidad.
Escalar y ajustar la tecnología para que se adapte a las necesidades de la organización para que pueda evolucionar de manera correcta.
La infraestructura ofrece la continuidad del servicio, mantiene la unidad operativa y evita cortes de fallas que repercuta directamente en la productividad del negocio.
Los datos de una empresa hoy en día se están convirtiendo en el activo más valioso de cualquier organización, ya que es importante prevenir cualquier fuga de información o pérdida de datos.
Porque se accede a recursos de nivel empresarial de los que muchas veces solamente las grandes empresas pueden tener acceso por el tema del costo inicial y permite que las organizaciones accedan a esos mismos recursos y empatando en tema de competitividad.
Las grandes industrias que tienen acceso a tecnología robusta pueden acceder a esos mismos beneficios para implementar sus aplicaciones, sus servicios de entrega, etc.
Mi recomendación es siempre partir desde el requerimiento y adaptar la tecnología a este, no al revés, no adaptarnos nosotros a la tecnología. Dependiendo de cuál es el requerimiento y para que se va a usar, nos permitirá una mejor toma de decisión en cuanto a cuál es la mejor solución a implementar.
Tener una correcta dimensión del requerimiento no solamente presente sino al crecimiento de por lo menos 3 a 5 años para que la infraestructura pueda brindar el soporte adecuado a las demandas de la organización.
Dentro de alguna de las noticias recientes acerca de esta tendencia hay un estudio de Cloud Computing Survey del 2022, que indica que casi las 3⁄4 partes, alrededor del 72% de los responsables de toma de decisiones de TI, están afirmando acerca de la adopción de servicios basados en nube.
Esto derivado de la facilidad de adquirir nuevas capacidades técnicas, prácticamente cualquier organización ya se puede subir a ese mercado de la entrega como servicio dentro de las cuales participan muchas nubes que se llaman públicas y que permite que todos puedan tener una infraestructura robusta, confiable y de última generación.
Entonces, basado en esta estadística creo que es bastante importante tener un plan sobre la adopción de esas tecnologías y observar cuales son las nuevas tendencias para que la organización siempre se mantenga constantemente actualizada.
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